Normalmente, asociamos la palabra “shad” con “aparejo ligero”. El Power Dunk SP nos permite, en cambio, pescar en escenarios muy variados, como pequeñas coberturas, zonas profundas y hasta en grandes lagos.

La situación en la que el Power Dunk demuestra todo su potencial es, sobretodo, cuando los basses no reaccionan al movimiento de los habituales deep crank.
Por ejemplo, en el caso de una bajada de la temperatura del agua, desde el otoño hasta la primavera, o bien, en situaciones de agua clara o de fuerte presión de pesca.
La primera razón que explica la enorme diferencia, en términos de capturas, entre el Power Dunk y los normales deep crank es la increíble capacidad de lance de este shad de pequeño cuerpo. La ventaja es que también podemos buscar a los basses en situaciones de viento desfavorable, algo imposible con otros cranks de estas dimensiones.

La profundidad máxima de inmersión se registró en 4,2 m utilizando 8 libras de fluorocarbono. La franja en que obtiene mayor número de capturas es la que va de los dos a los cuatro metros, teniendo bien presente que es posible hacerle batir el fondo, en el caso de aguas con poca profundidad, gracias a su exclusiva propiedad anti-algas.
El Power Dunk también puede ser utilizado con una técnica específica, llamada hung-off. Se trata de recuperar dulcemente el cebo hasta que se produzca un ligero contacto entre el babero y los obstáculos situados bajo el agua, refugio habitual de los basses, después de este contacto, dejar el Power Dunk suspendido algunos segundos y esperar la acometida.
El Power Dunk posee altísimas prestaciones, como propiedades anti-algas, posibilidad de efectuar largos lances y alta eficacia en aguas profundas.

¡Un shad de una nueva dimensión, que captura basses que antes no se dejaban engañar por los hard lures normales!